
¿Qué queda?
Después de una vida compartida, ¿qué queda?
Nos entregamos, nos esforzamos, luchamos por cumplir y cuando nos descargamos de responsabilidades y nos miramos a la cara, sin ruido, ¿qué queda?
Quedamos nosotros y es el momento de decidir, de valorar, de sopesar si el paso del tiempo nos cambió tanto que ya ni nos conocemos. ¿Cuánto hace que no hablamos de nosotros? ¿Cuántas cosas se quedaron pendientes por las obligaciones del día a día?
Y qué difícil ahora que estamos cada uno en un extremo, qué difícil ahora que nos separamos para sobrevivir y buscamos de manera paralela un lugar donde ser, donde sentir, y nos alejamos sin darnos cuenta.
¿Cómo volver ahora a un punto de encuentro? hay heridas infectadas que aún duelen.
Es el momento de decidir, de evaluar juntos si esto que construimos merece ser salvado o soltamos la red, pero juntos. Es algo nuestro, seamos respetuosos y soltemos despacio para que no se rompa nuestra obra, que ésta pueda volar sin nosotros y podamos iniciar algo nuevo desde la paz interior.
Y si al soltar, nuestras manos se rozan y se eriza nuestro vello, tendremos la prueba de que es posible zurcir esos rotos y continuar construyendo, porque tejimos una red fuerte.
Estamos en otoño, es tiempo de soltar, mira hacia dentro y decide de corazón qué vas a soltar.
Victoria Eugenia García Martínez
Psicóloga y Coach